martes, 5 de marzo de 2013

I love myself


Entre mis "deberes" de verano estaba leerme "Cincuenta sombras de Grey". Y como soy una chica muy aplicada, al menos en cuestiones literarias, pues en estos días me puse a ello y ya me he terminado la primera parte. Leyéndolo, que me ha gustado el primero (el resto me parecen un coñazo), me he acordado de una conversación que tuve hace unos días con unos compañeros. Esta trataba de la masturbación femenina. Me preguntaban, a mí, como si yo fuera una experta, a qué edad empezamos las chicas a masturbarnos, qué frecuencia y, sobre todo, cómo nos inspiramos para la masturbación.

masturbación femenina


Yo les hablaba de que la masturbación femenina es un tema tabú, al menos lo era cuando yo era una adolescente. Y creo que sigue siéndolo. De hecho, he estado en millones de conversaciones sobre sexo, tanto con hombres como con mujeres, y he oído hablar de la masturbación masculina, pero nunca de la femenina.

En esta sociedad, que, se supone, tan avanzada, seguimos teniendo tabúes respecto al sexo. ¿Por qué? La verdad es que no tengo la respuesta. Sin embargo, es así. No nos comportamos con naturalidad ante un tema tan natural como el sexo. Pensamos que si hablamos de nuestros gustos, de nuestras preferencias nos juzgarán. No somos capaces de desinhibirnos y de hablar claramente sobre nuestras apetencias. Y la verdad, es que me cansa tanta hipocresía. Sin embargo, vivo y convivo con ella. Pero también quiero luchar contra ella.

Por ello, por una parte, me gusta tanto "Cincuenta sombras de Grey". Porque intenta tratar un tema, como el BDSM, con naturalidad. No obstante, después de haberlo leído, creo dos cosas: es más tierno que el osito Mimosín y humillante para las mujeres. Porque que clasifiquen este libro como porno para mujeres... Pues mire usted, no, es un libro en el que se describen relaciones sexuales con todo detalle, pero no le veo ni como un libro porno ni como un libro iniciático al BDSM o a un mundo de fantasía sexual.

Así que nada, si todos pusiéramos de nuestra parte y tratáramos con confianza y sin juzgar las preferencias sexuales de cada cual, dejaría de haber tabúes.

P.S. Este post es para mi compañero y, sin embargo amigo Frank. Me encanta cada conversación contigo, hablando contigo aprendo cada día más y mis opiniones se enriquecen con las tuyas.

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